Los camareros y la gente nos miraba mucho , yo pensé claro dos personas pidiendo tanto no es normal, bueno salimos con el estómago llenisimo pero bastante satisfechos, por lo que no dude volver al sitio.
Lo cual lo he estado en repetidas ocasiones, y os lo recomiendo al cien por cien, y eso si esta siempre a reventar , los camareros bastante amables , los precios bastante asequibles y para todos los bolsillos.
El secreto, pides una caña y te traen un tapa o más bien una ración no has pedido la segunda caña y te ponen la segunda ración, pidas lo que pidas el trato es amable , y con cañas te vas casa prácticamente cenado , el precio 1.80 la caña y lo mejor es que las tapas estan buenisimas y todas son distintas , el sitio, el típico bar de barrio de toda la vida para picar algo de pie. Se encuentra en la calle don ramón de la cruz 109. Eso si no pidáis raciones porque no es necesario.
